Espacio y estructura – Parte 1: Uso del espacio

Con este post empezamos la seguidilla de post informativos sobre el espacio y la estructura en el diseño gráfico. A continuación les dejo un concepto que debemos tener claro para entender la secuencia que se viene.

Maquetación (o maqueta): presentación del texto y de las imágenes según un determinado diseño para mostrar cómo quedará la página u otro soporte impreso.



Uso del espacio
Una maquetación se compone de muchos elementos distintos: tipografía, imágenes, líneas, caracteres, espacios. Sin embargo, siempre que se empieza a maquetar, se comienza con un espacio abierto, en blanco.

Si consideras los elementos no espaciales como simples objetos geométricos, la maquetación puede descomponerse en la relación entre dichos elementos y el espacio que los rodea. La esencia del diseño gráfico de calidad radica en manejar con éxito esta relación.

Espacio en blanco
Se trata de un espacio no ocupado por elementos gráficos, pues el “blanco” se refiere al papel en blanco. Los recién llegados al mundo del Diseño Gráfico tienden a sentirse un tanto inquietos por los espacios en blanco, y suelen verlos como una oportunidad perdida de meter con calzador un par de fotos y un poco más de texto. Pero los diseñadores con experiencia utilizan ese mismo espacio en blanco como una parte integral de la maquetación al servicio de dos objetivos fundamentales.

El primero es proporcionar un marco a objetos aislados o grupos, lo que ayuda a distinguirlos de otros elementos de la maquetación. Este planteamiento permite una organización mayor de la página y una claridad visual mayor. El segundo es favorecer la navegación visual o fluidez, para lograr que la mirada recorra la maqueta en el orden deseado o que se fije en un determinado elemento. Podría compararse con la forma en que un diseñador de jardines consigue atrar la atención a una vista espectacular o un detalle en particular.

Los espacios en blanco son un recurso muy útil si se los usa de forma correcta, le darán un toque más profesional a los proyectos que empieces.

En el ejemplo de la izquierda, ¿leemos primero el texto o nos fijamos en el espacio en blanco y adivinamos por asociación e instantáneamente sabemos lo que dice el texto? Prácticamente toda esta maquetación es espacio en blanco, pero, no obstante, sigue siendo una muestra de diseño muy efectiva. También resulta interesante comprobar que las palabras pueden leerse con claridad pese a que varios de los caracteres se encuentran parcialmente cortados.
En contraste con el ejemplo de la izquierda, aquí el espacio en blanco crea un marco muy definido en torno a la información textual. el espacio recalca el mensaje y concentra la atención del espectador de forma muy eficaz sobre la tipografía. Nótese que el bloque de texto está colocado ligeramente por encima del centro de la página. Si estuviera colocado en el centro exacto, daría la impresión de estar demasiado bajo.

Composición
Al maquetar es casi seguro que combinarás varios elementos, por ejemplo una caja de texto con una imagen y un título.
Los productos de estas combinaciones se denominan “formas”. Considéralas como la parte positiva de la maquetación y el espacio como la parte negativa. Es una buena manera de empezar a comprender cómo manipular la relación entre forma y espacio para obtener una buena maqueta. Un exceso de las formas positivas hará que tu maqueta dé la impresión de estar apretujada y recargada, mientras que un exceso de espacio negativo dará la sensación de vacío. Cómo gestionar esta relación vendrá determinado por lo que desees transmitir en tu proyecto. Para un diseño contundente hay que utilizar contrastes de forma y espacio muy marcados; para una maquetación de efecto más relajante, es precisa una relación más abierta entre los elementos positivos y negativos.

Espacio en blanco no deseado.
Una advertencia, se debe evitar aquello que los diseñadores profesionales denominan «espacio en blanco no deseado». Se trata de espacios atrapados entre dos o más formas y que no favorecen en nada la plantilla de la maquetación. En la práctica, el espacio atrapado es espacio no planeado, pues no se genera de forma intencionada. Puede tratarse de un blanco en medio de una maqueta; entre las imágenes y el texto, o de un espacio molesto situado entre formas yuxtapuestas. En cualquier caso, si compruebas que hay áreas de espacio que no tienen finalidad alguna, seguramente conviene replantearse la maquetación elegida.

Fuente: Diseño Gráfico para no diseñadores.

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